Historía de los primeros relojes de pulsera

Ya era el final de la primera guerra mundial. El mundo se estaba reconstruyendo del primer gran desastre. Los triunfadores recibían a sus soldados y velaban a sus héroes, los perdedores enterraban a sus muertos y sus orgullos. Los diarios de la época se llenaban de esperanzas y empezaban algunos lujos.


Durante la guerra la exactitud del tiempo permitía a los batallones coordinarse silenciosa y precisamente. Adelantarse al campo un minuto podía significar la muerte. Es por eso que empieza a fabricarse el reloj de pulsera para evitar la necesidad de sacarlo del pantalón. Incluso las manecillas se impregnaron de una sustancia química para evitar sacar linternas en la noche y ser blanco fácil. El antiguo modelo de bolsillo se había transformado. Esa ventaja militar se transfirió luego al mundo civil llegando al significado de hoy, como sinónimo de confianza y éxito.


En el pasado quedó ese primer reloj de pulsera de 1812 por Abraham Louis Breguet para la reina de Nápoles y hermana de Napoleón que daría el paso a la moda femenina. Un periodo oscuro cubre al reloj de pulsera hasta que se le encuentra utilidad en la guerra, dada su comodidad de uso sin necesidad de interrumpir acciones con ambas manos. Es por es que en 1880 Girard-Perregaux subministra sus modelos a la Armada imperial Alemana dando la partida a que diversas revistas en 1900 mostraran los diseños militares como innovación. Luego vendría el reloj de Louis Cartier para el aviador Santos-Dumont, seguiría Wilsdorf con Rolex y la Hamilton Watch Company. Otros relojes continuarían haciendo su parición, los de Zenith y los Longines.


El movimiento tomaría fuerza de forma natural, al demostrar al por mayor en las muñecas de millones de hombres jóvenes que resistían las más duras condiciones, la comodidad de su uso y las posibilidades de una moda que se masificaría con las posibilidades de las ofertas del mercado. Se impondría la variabilidad de sus modelos que permiten mostrar la individualidad y personalidad de quien lo usa.